Me balanceé de un lado a otro del
columpio con la mirada perdida en los árboles más allá de las vallas. Aquella
Academia daba cabida a Guardianes de todas las edades, y sus instalaciones
habían sido construidas en torno a ello: tenía arenero, columpios, balancines…
Recordé que en mi orfanato no había nada de aquello, pero aparté la idea de
malas maneras.
-Alec, creo que si me consigues
una chaqueta de cuero bueno podría borrar que me robaras los trajes del
trabajo.
Levanté la mirada hacia la
Cucaracha, sentada distendidamente sobre el columpio a mi lado. Sobre el regazo
llevaba la tabla atestada de palabras y tachones: el resumen de nuestra
relación. Se concentraba en encontrar aquellas cosas que se compensaran entre
sí con auténtico empeño. Sabía
que por fácil que así pareciera el sistema, a ella no se lo era tanto y el
resquemor de las heridas nunca le desaparecería del todo. Pero se esforzaría
para mantenerlo controlado. De modo que yo la dejaba hacer y hasta
colaboraba, aunque sabía que pronto no estaría (mejorar nuestra relación a
largo plazo era una gran pérdida de tiempo). Pero tampoco quería informarla de
aquel detalle (la tristeza la volvería demasiado cansina).
-Los di a la beneficencia, ¿eso no cuenta? ¿Y
no prefieres unos trajes nuevos?
-¿Trajes? ¿Para qué los quiero
pudiendo tener una buena chaqueta de motorista?
-Tienes razón, la chaqueta
impresiona más en las reuniones de trabajo.
Los dos reímos distraídamente.
Disfruté de la humedad olorosa de
los robles y la calma del momento. Lo nuestro nos había costado conseguirla,
pues era difícil que nuestras personalidades no chocaran, y es que ante los
roces actuábamos de manera similar: poniéndonos a la defensiva y atacando los
puntos flacos del otro. Pero habíamos descubierto que, aunque el odio no
desaparecía, este era un odio relajado (no nos importaba lo que pasara entre nosotros porque estábamos
acostumbrados y después de todo lo ocurrido, difícilmente iba a empeorar).
Aunque por malos motivos, nuestro vínculo era bastante estable y eso daba
seguridad, lo que empezaba a hacerse extrañamente agradable. No hacía falta ser
cuidadoso en mantener una farsa social. No sé cómo explicarlo, pero conocer tan
bien los defectos del otro hacía que no nos preocupábamos lo más mínimo por
cagarla o ser desagradable, ya lo habíamos hecho hasta la saciedad…
-¿Te enteraste de lo ocurrido con
Gigi? Han tenido que inyectarle calmantes, pobre chico.
-Ah, sí, sé lo de la visión
(interrumpió una discusión que tenía con Albert para empezar a gritarla).
La Cucaracha levantó la cabeza
hacia mí, en sus ojos resplandeció el brillo metálico de Flor. -¿Discutiendo?
–Asentí. Ella guardó silencio unos instantes, buscando las palabras con las que
formar sus preguntas, casi podía ver los engranajes de su cerebro moverse-. No
sé por qué odias tanto a Albert; es un tipo agradable, protector… y es obvio
que se desvive por intentar ayudarte. Creo que de verdad le importas. Y está
intento hacer las paces contigo, tal vez deberías darle una oportunidad.
Piénsatelo, podría gustarte lo que obtengas.
-Humm.
-Os conocíais de antes, ¿verdad?
-Sí.
-¿Desde cuándo? Siento
curiosidad.
Dejé la mirada perdida en un
grupo de Guardianes que jugaban al baloncesto.
-Mi primer recuerdo de él es de
cuando tenía seis años.
La sorpresa hizo resplandecer de
nuevo sus ojos, y esta vez, también el pelo en un rápido relámpago. Se quedó
muda, analizando mi perfil serio y distraído, mi barbilla marcada, la boca
seria, mi mirada distante y el pelo lacio y sin brillo por la mala
alimentación. Una densa preocupación le deformó el rostro. Lo sospechaba.
Le lancé una mirada de soslayo
como advertencia; no más preguntas sobre
este tema.
Nicole agachó la cabeza hacia la
libreta y pasó un par de páginas.
-Tampoco tienes intención de
hacer las paces con Lena.
-Tampoco.
La Cucaracha suspiró quedamente,
aunque la sonrisa dulce no desapareció de su rostro. Siempre que me miraba, sus
ojos resplandecían levemente de aquella forma inhumana y parecían volverse más
suaves y soñadores de lo que jamás los había visto. Siempre. Lo cual me ponía
nervioso.
-Yo creo que Rob y ella
estuvieron liados –enlazó el tema sin darse cuenta, como se había convertido
nuestra costumbre.
-Pensaba lo mismo, pero nunca
llegaron a nada (Lena es virgen y me dijo que nunca antes la habían besado; me
da que es cierto).
-Lo mismo fueron demasiado
paraditos para llegar a declararse –se encogió de hombros-. Aunque no entiendo
el porqué si Rob es siempre muy seguro de sí mismo y echado para adelante,
incluso temerario. A Rob le gusta ella, casi seguro, la mira muy raro cuando
ella está entrenando.
-¿Raro?
-Me ignora, como si no existiera,
y eso que normalmente intenta lucirse y pavonearse delante de mí.
-Hum. Yo pensaba lo mismo de
Lena, cuando entré en la Orden era así siempre. ¿Por qué sacas el tema?
-Creo que Robert me va a pedir
matrimonio. Antes lo hacía sutilmente y me sentía muy alagada, pero desde lo
que ocurrió contigo en los laboratorios… se le nota forzado en todo. Eso hizo
que me fijara. Está preocupado por si tú eres un contrincante para conseguir a
Lena –hizo un amago de sonrisa sin diversión alzando las cejas en un gesto
desesperado.
La miré fijamente. -¿Y qué le
dirás?
-¿Tú qué crees? –espetó, ofendida
por mi simple momento de duda.
-Que eres demasiado orgullosa
como para aceptar ser la esposa de alguien enamorado de otra, te largarías
antes de resignarte a segundo plato.
-Pues eso. –Volvió a alzar la
mirada sobre el borde de sus gruesas lentes, y rezongó, como exasperada, lo
siguiente-: Aunque Flor insiste en que te diga que contigo haría una excepción
–volvió a torcer la boca en una mueca.
Me reí inclinándome hacia atrás
para contemplar las nubes pasar. -¿Gracias?
-También dice que deberías hablar
con Lena para así darte cuenta de que ella no te gusta, si no que estás
locamente enamorado de nosotras, o al menos de ella.
-¿Y si no fuera así? -La
Cucaracha se mantuvo en silencio. Volví a mirarla, estaba demasiado seria. -Se
me hace raro que no intentes preguntar más –admití quedamente-. Lo normal sería
que intentaras aprovechar al máximo que tenga la lengua tan suelta.
-No quiero que por ponerte
incómodo te alejes de mí. Y no quiero
tener que saberlo… porque, porque así no tendré que elegir entre hundir mi
orgullo o hundirme yo, pues puede que no esté dispuesta a desistir aunque eso
me convierta en tu segundo plato. Odio tener que tragarme mis palabras, lo
sabes. –Suspiró intentando que no se le escuchara- Y ya sé que no puedo
posponerlo para siempre pero es que aún no sé cómo reaccionaré. –miró fijamente
la libreta mientras yo la estudiaba. Nicole estaba apagada, aquellos temas la
entristecían y la hacían sentir impotente-. A ella le gustas.
-¿Más de lo que le gusta Robert?
-Eso ya no estoy segura, ni
aunque intentáramos ser imparciales Flor y yo.
-No os gusta Lena –sentencié algo
que ya conocía desde hacía muchísimo tiempo.
-No –ni siquiera sé inmutó al
contestar. Empezó a juguetear con los bordes de los márgenes-. Aunque suene
fuerte, opino que es una cobardica, insulsa, sin amor propio y sin
personalidad. Es demasiado dependiente para si quiera darse cuenta de lo que de
verdad desea.
-¿Yo?
-Puede. Aunque supongo que algo
bueno tendrá –se encogió de hombros-. No me gusta este tema.
-De acuerdo, no lo sacaré más.
-Oh, qué gentil –se burló-. ¿No
será que al que no le gusta el tema es a ti?
-Puede.
-¿Cuánto más lo pospondrás tú?
Albert, Lena… todo.
-Tanto como me sea posible.
Ella sonrió.
-Podría tachar muchas cosas si
decidieras ponerle fin a este suplicio. Piénsatelo. Aunque si la solución es
acabar en brazos de otra, quizá mejor si nos das tiempo para hacerte cambiar de
opinión.
***
El nuevo despacho de Albert en la
Academia era agradable: una habitación semicircular, más alta que ancha, hecha
en su totalidad de madera de nogal, desde la puerta en la pared recta hasta las
estanterías pasando por el escritorio y el mueble bar. También paredes y suelo.
Me sentía como metido dentro de un árbol, cual ardilla aristocrática (feel like
a squirrel sir). Y las butacas de cuero eran sin duda confortables; sentencié
allí despatarrado, con las piernas colgando por un reposabrazos.
Me gustaba esconderme allí cuando
Albert estaba fuera, durante los lapsus de tiempo que me dejaban mis nuevas
ocupaciones entre el comienzo y final de cada una (como sabían que me llevaba
mal con él, nadie me buscaba aquí). Era el único sitio donde podía quedarme
leyendo o viendo telenovelas (gracias a las cuales estoy sufriendo una terrible
adicción que me llevará por el camino de la amargura como Miren Mamor Tellechea de la
Rosa no se le diga a Josefina Carmen Mª Bersabé de las Marismas que sabe lo del hijo
secreto que se fue a la guerra y acabo sin memoria trabajando en la hacienda de
Gabriela Chevalier) sin que ningún Guardián me viniera a buscar (¡ya estoy
harto que me interrumpan en mitad de las reposiciones de “Amar en tiempos de
cuernos”!); lo único que tenía que hacer era ignorar los golpes en la puerta
hasta que el que llamaba se cansase, ya que nadie se atrevía a entrar sin
permiso en el despacho de un alto cargo como él.
Hasta aquella mañana:
Alcé la barbilla hacia la entrada
al sentir que alguien llegaba de forma acelerada y estaba ya a dos pasos. La
puerta se abrió de repente sin ser precedida de ningún tipo de llamada o
advertencia.
-Albert, necesitamos… -la voz de
Lena se apagó como un fuego con un golpe de viento.
Rob apareció detrás.
-Fue a visitar a algún Arzobispo
para que les prestara una catedral durante un par de semanas, o algo así.
Preguntad a Gin (se lo oí decir a él) –informé volviendo a concentrarme en mi
lectura (el capítulo de hoy ya me lo había visto y en el Discovery no ponen
nada).
Lena agachó la cabeza y salió de
la habitación. La sentí dirigirse por el largo pasillo hacia las enfermerías.
Rob se hizo a un lado para
dejarla pasar, pero en lugar de seguirla se quedó allí de pie, contemplándola
marchar. Estudié la expresión de sus ojos; algún sentimiento turbulento se
movía en ellos: culpa, ¿anhelo? Se giró hacia mí rápidamente, con el odio
encendido en la cara.
-¿Qué haces aquí? –me exigió,
puesto que consideraba un ultraje que me colara y profanara los aposentos de su
padre y jefe (es tan simple este pobre chico…).
-Perder el tiempo –pasé la página
sin alterar mi voz; no me merecía interés aquel gilipollas (nunca se la merecía
aunque yo se la prestase).
-No puedes estar aquí.
Chasqueé la lengua. -Según tú
no puedo estar en ningún lado.
-Maldita escoria… no sé cómo lo
has conseguido pero haré que te arrepientas el resto de lo que te quede de
vida.
-¿Conseguir qué? –pasé la
siguiente página.
Soltó una carcajada
condescendiente. –Creía que tú lo sabías todo…
-Sé mucho, desde luego más que
tú. Pero no todo –cerré el libro sin molestarme en marcar la página y lo
devolví a su lugar en la estantería, estirando el brazo por detrás de la
cabeza.
-Lo que les has hecho a todos
–explicó consiguiendo que no entendiera nada-. No sé qué clase de hechizo
habrás lanzado sobre ellos que no podemos descubrir, pero yo lo haré, ten por
seguro que lo haré.
-Cada día eres más idiota porque
cuanto más te escucho, menos sentido tiene lo que dices. Y debería ser al revés
(yo que tú me preocuparía). No sé sobre qué hechizo me hablas.
Rob gruñó, tensando los hombros y
remarcando las venas del cuello y la frente.
-Has hechizado a todos. Es la
única explicación para que Nicole pueda defender a una escoria como tú.
-Humm, ahora lo entiendo: herí tu
orgullo de machito… de nuevo –resoplé, poniéndome en pie y tomando las muletas
hacia la puerta-. No he usado ningún tipo de poder sobrehumano para anular la
voluntad de Nicole, Colyn, Albert... ni ninguno de tus amiguitos.
-¿Pretendes que me crea que quedó
prendada de tu fascinante personalidad y talante? –me cortó el paso,
atravesando la entrada con su brazo.
Lo miré a la cara; no era más que
un crío con su pataleta. Me encogí de hombros. -Si te sirve de consuelo, ella
nunca ha tenido buen gusto para los hombres (fíjate que llegaste a gustarle tú;
más pruebas…).
Me agaché para pasar y seguí por
el pasillo recto. El-que-se-hace-el-héroe vino detrás. ¿Y ahora qué?
-¡Entonces es que los manipulas!
Igual que con mi padre.
Aún se percibía con fuerza la
esencia de Lena al tomar aquel camino.
-Todos manipulamos; hasta las
buenas acciones las hacemos en nuestro provecho para conseguir la recompensa de
sentirnos “mejores” que otros. –Frené en seco y le encaré de repente,
haciéndolo trastabillar-. Incluso ahora tú lo estás haciendo: atacándome por lo
que supones que he hecho a tus amigos cuando lo que de verdad quieres es saber
cómo pude llegar a gustarle a Lena sin que se te note. Porque yo le gustaba.
Las venas volvieron a palpitar
con más fuerza. Me mantuve impasible aguardando su contestación, aunque estaba
bastante clara:
-Tampoco permitiré que hieras a
Lena.
Puse los ojos en blanco. –Ah,
claro, tú crees que como soy una escoria demoniaca--, mis únicos planes fueron,
incluso desde niño, engatusar a Lena para luego destrozarla, que de siempre lo
único que quise fue hacerle daño, porque soy maaaaalooo –dramaticé.
-Exacto: tú lo único que quieres
es hacerla sufrir. La matarías en cuanto pudieras. O algo peor.
Puse los ojos en blanco.
-¿Te estás oyendo, imbécil?
Carece de sentido lo que dices; he de recordarte que salté a un lago helado
para rescatarla. Arriesgue mi vida por ella.
Ese recordatorio lo hizo dudar,
pero no fue suficiente: -Era parte de tu plan, eres lo suficientemente
retorcido incluso para eso.
-Vale que sea retorcido, pero no
hice semejante estupidez por eso –la furia del-que-se-hace-el-héroe empezó a contagiárseme,
haciendo que alzara la voz.
-¿¡Y por qué lo hiciste!?
-¡Pues porque estaba enamorado de
ella, es obvio! –alcé las manos, sentía verdaderos deseos de abofetearlo y de
abofetearme a mí mismo. Pero sin embargo, el sentido común y el pánico me hicieron
dar media vuelta para huir lejos de la tormenta. No debía haber dicho eso, maldito sea yo.
No di ni un solo paso. Me había
quedado pálido y helado, mi único gesto: mordisquearme el labio inferior de
puro nervio. No debía haber dicho eso,
maldito sea yo; se empezó a repetir en mi cabeza como un disco rayado.
-Yo… había decidido volver… como
Robert no venía…
Uno de los peores momentos de mi
vida, sin duda. Normalmente, incluso cuando estaba en peligro de muerte, me
venían planes a la cabeza. En ese momento estaba completamente bloqueado,
dentro de mi cabeza empezó a escucharse de la nada el interminable tictac de un
reloj informándome de que seguía allí petrificado entre los dos Guardianes.
Estaba aterrado, como una
colegiala de un internado religioso a la que había atrapado sus padres y el
director bajándose las bragas frente al conserje (sí, otra escena de “Amar en
tiempos de cuernos”; dije que estaba enganchado).
La implicada de Lena lo ha oído. Huye, huye, ¡huye! Di algo. Lánzate
por las escaleras. ¡Haz algo!
Dios!!!!!!! No sb por donde enpezar... Primero mi teoria esla misma q la d nicole, ya t lo dije jajaja tiene q ablar con lena pa q se d cuenta q no la qiere kajaka almenos eso espero...y dios.pienso igual q nicole sobee lena, ni tienw caracter ni nada.y lo ultimo aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa dios aaaaaaaaaa no qiero a lena y alec juntos nooo despues.d esto no s q va a pasar ...pero vaya apuesto q la tonta no dira naa. Pfff me muero por leer el sigiente, esto cada vez se pone mas interesant ^^
ResponderEliminarYú inspiraste ese comentario de que hablara con Lena. MUCHAS GRACIAS (ves, para esto me servís xD). Resiste, Noemi, y sigue avanzando!!!!
EliminarOh, vamos, confío en la Supervisora. Lo más corriente y predecible sería que no dijera nada y se marchara toda avergonzada, quizá después de que Alec dijera algo doloroso, así que yo creo que nos va a sorprender <3
ResponderEliminarPues a mí sí me parece que Lena tiene carácter, es una chica muy tímida, pero valiente, bondadosa y de buen corazón *--*
Claaaaaaaaro, si para 'tener carácter' hay que ser como esa rubia agresiva que va dando puñetazos hasta que un chico en ese momento debilitado como Alec se cae al suelo...pues entonces, habrá distintas percepciones de carácter e_é
Ahora voy a ponerte mi comentario en modo locura extreme de osito gore Gaby XDDD
Gabriela Chevalier, Carmen Mª Bersabe JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA QUE GUAAAAAY <33333
Awww, you're adorable!
¡Ahora voy con el segundo comentario!^^
OML! 2 comentarios!!! Estamos volviendo a los viejos tiempos, se acabço tu etapa de mutismo!!!!
EliminarEjem, así que confias en mí...
Y había un tercer nombre XD Para que veaís que tendréis un huequecito entre estas entradas, muajajajaaja (suena a peloteo)
*EN SHOCK EMOCIONAL*
ResponderEliminarEstoy...muy...confundida...no...sé...qué...siento (?)
DDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD:
Veamos:
1) *Coge tranquilamente una metralleta, se convierte en el osito gore Gaby y descuartiza a la Cucaracha*
"Opino que es una cobardica, insulsa, sin amor propio y sin personalidad"
¡¿COBARDE?! LENA ES MUY VALIENTE, MUCHO MÁS QUE TÚ, DE ESO ESTOY SEGURA. Como fue en medio de la boda demoniaca a quitarle las ataduras a Alec♥ o al principio, con los hombres lobo.
Tiene mucha personalidad, es TÍMIDA, JODER, TÍMIDA D: ¿Qué pasa? ¿Todos tienen que ser como tú? ¿Para tener personalidad tienes que ser una bipolar violenta que va pegando puñetazos a un medio demonio indefenso hasta llegar a tirarlo al suelo y dejarlo sangrando? ¡¡¡¡Qué knagnlsofhldo!!!! D:
Y SABES QUÉ. ¡¡¡¡QUE SÍ, ERES EL SEGUNDO PLATO DE LOS DOS CHICOS!!!! No te mereces a ninguno de ellos, ni a Rob ni a Alec. Ojalá hubieras muerto al principio T_T
Amy era mejor contrincante, al menos ella admitía que era una guarra.
2) *Se le pasa la furia infernal y es todo rosa y amoroso* KYYYYYYYYYYYYYYYYAAAAAAAAAAA
OHDIOSOHDIOSOHDIOSOHDASJPGSLHNSFLNHFDLNHLKDFGLNHFG♥
¡¡¡¡Taaaaaaaaaaanto tiempo esperando por esto!!!! Awww, por favor! ¡Que no paro de gritar! XDD
Rob está CELOSO. CELOS. CELOSO. ROB CELOSO. ROOOOOOOOOOOOOOOOOOOOB, te amo mucho vale? ;_; Está obligado a casarse con la Cucaracha cuando en realidad ama a otra...es tan triste T_T Me gusta Robena♥
3) KYYYYYYYYYYYYYYYYYYYYYYYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA *escupiendo en el cubo de los Kyas* ALEC DIJO QUE ESTABA ENAMORADO DE ELLA. LO DIJO. LO DIJO.
Y LENA LO ESCUCHÓ.
Eso sí, ahora no vale huir, eh, ahora hay que decir las cosas claras. Pero...ohdiosmío....a Alec le gusta Lena....a Lena le gusta Alec....¿¿Y ROBERT?? ¡¡¡TAMBIEN LE GUSTA ROB!! Y A ROB LENA.
OHDIOSMÍO, TRIÁNGULO AMOROSOOOOOOOOOOOOOOOOOOO <333333333333333333
La verdad es que seré feliz con que acabe con cualquiera de los dos, no puedo elegir :')
*_* Qué largo y completo, da gusto!!! Ojala todos los comentarios fueran así XD
EliminarBueno, ya sabía que querrías matarla, pero aguantaste hasta el final!!! Y ahí estaba la "recompensa"
Siiiiiiiiiiiiiiii, está celosíiiiiiiinnn *risilla perversa y pervertida* Joojojo, tiene su puntillo que se ponga así, hay que admitirlo
Robena... humm, creo que también lo usará XD Voy a tener que apuntarme todos los moes de las parejas.
Pero la duda queda es: Crees que podrás aguantar con esto hasta que suba este y el siguiente?
Y qué cosas cambiarías o retocarías (a parte de matar o insultar más a la Cucaracha, tampoco admito bailes xD)
No me apetece dejar un largo comentario pero ¡O MY MADRE! Me encantaaaaaa :) a la cucharacha que le jodan ¡LENA! !¡DIOS, LO DIJO! Ya no hay excusaaaa escribe el siguiente mañana
ResponderEliminarxD Eso suena a amenaza
EliminarGaby !!!!!!!!!!!!!111 deja ya a mi Nicole si no quieres que corra sangre......Lena sera muy buena perdsona y lo que tu quieras pero es una pavaaaaaaaaaaaaaaaaa esq siempre tiene que salir hullendo ¿¿?? Por dios un poco de sangre en las venas !!!!!!
ResponderEliminary tia porq dices que Nicole es una guarra ?¿?¿ q yo aya leido no va con unos y otros le gusta alec !!!!!! y esta luchando por el, no como lena ¬¬
Soy un personaje de culebrón!!! *excitación 10000 %* XD Como sabes ganarte mi corazón gambuno, malvada y culebronil mujer (que conste que me ha hecho un ailusión terrible, y que ahora mismito estoy emocionada cual fan teenager XD Que cuki eres, por satán que si!)
ResponderEliminarBueno sabiendo que en los culebrones que le gustan a Alec salimos nosotras, esto adquiere proporciones épicas jajaja además del hecho de tu extenso conocimiento acerca de los memes del internerr *voz de Enjuto Mojamuto* como Like a sir en su versión de ardilla XD Voy a intentar plasmar eso en el papel, es que solo de imaginarlo me entra la risa floja; tengo un sentido del humor bastante disperso y raruno XD
Creo que comprendo que Alec le gusten tanto los culebrones cuando su vida sería un hilo argumental perfecto para “Amar en tiempo de cuernos” (que ocurrencias, que fan que soy XD Que pelota!! Uyyyyyyy XD)
Creo que si Alec hubiese podido habría escapado haciendo la croqueta de el-que-se-hace-el-héroe y de Lena ni te digo, la pregunta es (como curiosidad…XD) ¿El hecho de que Alec sea tan culebronero se debe a ver tanta tele, a su vida en general o a que a la que le gustan los culebrones es a ti?!! Y quién dice culebrones dice juego de tronos, que el resultado es igual de retorcido XD
Ijjjjjjjjjjjj *es el ruido de mi fanatismo interno, no puedoo gritar* XD
Aish me ha encantado, me he reído muy a gusto a pesar de que el corazón me ha dado un par de vuelcos al leer su conversación con Nicole….En fin… Kristofinno estaría orgulloso de ti *Modo mama pollito orgullosa de su polluelo*
Tuya en el fanatismo, Gamba-Girl (L)
Me encanta tu mirar tu comentario... es tan largo y concurrido! xD
EliminarSí, eres Josefina Carmen Mª de las Marismas del Pantano (lo del pantano me lo comí porque sí que quedaba largo xD), of course! Y eres la dueña de un hotelito en las marismas y por eso sabes todos los rollitos amorosos de la ciudad XD
Yo creo que a estas alturas tengo tu corazón en una vitrina o lo uso de colgante (ejem, ejem) gracias a mi malvaversión y culebronil personalidad, ojojojo
Epic MOments... sí, tengo intención de que haya, ya verás cuando Alec enganche a Yell y Camp a sus culebrones.... ya veras... ya.
A que sí???!!! Yo me imagino el feel like a sir ardilla y es que me río a parte de que lo imagino súper monísimo!! Estaré esperando tu versión, a ver si encaja con la mía mental xD
Busca consuelo en los culebrones a ver si así descubre cómo solucionar sus problemas xD
PELOTEO EVERYWHERE, tú tranqui que es bien recibido (bota, bota la pelota)
=_= Lo he visto, en serio, tal cual rodando por el suelo.
Hummm, ya te la respondí arriba y se debe a su vida en general XD Yo soy sólo la Supervisora...
O.o ese sonidito de tu fanatismo interno asusta un poquito, asegurate de no contestar que yo te quiero vivita muchos años más!!! (yo chillo como buena fan de esa misma manera a veces xD)
¿Me enumeras los vuelcos de corazón, por fi plis? *n*
Kristof, of course, AHORA MISMO ESTARÍA DESCOJONANDOSE EN SU TRONO
SOYYYYYY UNA ACTRIZ DEL CULEBRÓN AL QUE ALEC ESTÁ ENGANCHADO! *^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^*^* Ahora sí que soy feliz. Bueno habría sido feliz incluso sin salir, porque el capítulo ha sido de lo mejorcito, QUE DIGO, HA SIDO GENIAL, JODIDAMENTE GENIAL.
ResponderEliminarNicolexAlec forever, me encantan, es una pareja tan sumamente deliciosa y salada al mismo teiempo (sí, como si fueran ingredientes Xd). Tienen un punto picante y otro agrío que, oish, es espectacular (Feel like Argiñano)
Florrrr, que majosa.....algún día saldra del interior de nicole? Porque entonces habría una pelea de gatass, NicolesVsFlor ¡Todo por Alec!
ROBERT ERES MÁS IDOTA QUE HECHO DE ENCARGO!!! cÓMO VA A QUERER MATAR A LENA!! Pero me caes bien, porque el fondo eres un pobretón, que conste -.-
ALECCCCCC LO HA DICHOOO
LO HAAAA DICHOOO
LO HAAAA DICHOOO
Y LEEENNNAAA LO HA OÍDO Y CASI A MUERTO. y ROBERT TAMBIÉN!
Aish, que subidón....
MÁs!
Muajajajajajajajaja, esto da pie a muchas paranoias, Miren mamor Tellechea.
EliminarHummm. Y qué ingredientes sería cada uno? Alec un limón o una cebolla? Nicky jengibre? Rob tomate? XD
Lleva cuidado con el gorro de cocinero, que es peligroso!
No sé si Flor se independizará algún día, puede, desde luego a ella le encantaría. Pero lo mismo nos secuestra a Alec O.o
xD Creo que Rob nos salió así de fabrica. Es tan idiota que se le coge cariño (y dan ganas de hacerselo pasar mal)
SÍ, LO HIZO
LO HIZO
LO HIZO
Y LA OTRA LO ESCUCHÓ Y LE DIO UN PASMO. Y ROB LOS VA A MATAR (esperemos que no)
Ahora respiremos lentamente para poder seguir chillando.